CAIXANOVA Y MUSEO DAS PEREGRINACIÓNS. SANTIAGO DE COMPOSTELA

Con motivo del Xacobeo, varios museos en Santiago de Compostela abren sus salas para acoger al peregrino con exposiciones aptas para todas las edades y que no requieren de un público especializado.

En Caixanova, acompañando la conocida colección permanente, nos encontramos una planta del edificio dedicada a la catedral de Santiago, en la que utilizan fotografías de gran formato para mostrar partes o rincones del templo románico. En otra de las plantas la temática es el mundo animal, las paredes están llenas de fotografías enmarcadas, de mediano tamaño, a modo de documental, en la que se echaba de menos una proyección de algún video del National Geographic. Una exposición decepcionante para el que entra en el museo esperando ver arte.

Una situación parecida se repite en el Museo das Peregrinacións, también en la ciudad compostelana. La sala de exposiciones itinerantes decorada con fotografías en blanco y negro de temática religiosa.

Galería Trinta, exposición “El cielo en la incómoda ciudad” de Florentino Díaz

Muestra que combina instalaciones y piezas escultóricas con fotografía abordando el tema social desde el punto de vista de la indefensión del ciudadano frente a los abusos por parte de la política en cuanto a corrupción, prevaricación, cohecho, malversación, etc., en una puesta en escena correcta por parte de la galería.

Galería Metro, exposición de Lito Portela “Sálvese quien pueda”

Formas orgánicas a gran escala que nos remiten al mar como una fuente de inspiración del artista, es lo que nos encontramos en la galería Metro, piezas escultóricas que conforman una reflexión personal entre la visión irónica del arte y la existencia, de la caducidad de la vida y del arte.
La dimensión de las piezas y la estrechez del espacio hacen que no “respiren” correctamente, solo la buena iluminación consigue el realce de dichas piezas.

Museo de la Universidad, exposición de Liu Daxoan.

La muestra Caracteres heredados de Confucio de Liu Daxoan nos acerca la pintura abstracta de la caligrafía china. La colección pone de relevo la filosofía china por la que el ser humano forma parte de la Naturaleza, debiendo coexistir en sublime armonía.
Si bien la anterior exposición de Antón Lamazares estaba perfectamente integrada en el espacio expositivo, esta nueva muestra carece de esa “comunión” con este ya que el formato de las obras del artista se ven“devoradas” por la exhuberancia del entorno que interfiere en la contemplación de las mismas.

Pedro Dobao “De Valdeorras a Vigo” Casa das Artes (Vigo)

Absurdo título que encaja perfectamente con lo que se muestra en la exposición. Piezas escultóricas ejecutadas con materiales como hierro, acero, madera, bronce… sin ninguna unidad temática ni formal, esparcidas por la sala en lo alto de peanas blancas de diferentes medidas (algunas de la altura de una mesilla) que conforman un batiburrillo apenas despejado en el espacio central de la sala. Solo esperar que la siguiente sea “De Vigo a Valdeorras”.

Sala de Exposiciones del Centro Cultural Caixanova de Vigo: “Pano de fondo”

Exposición de retratos realizados en estudios fotográficos gallegos durante la primera mitad del siglo XX. Correcta muestra de fotografías antiguas ordenada por autores aprovechando los recovecos de la sala. Original preámbulo de la exposición mediante la colocación de un “pano de fondo” en la entrada. Buena iluminación e impecable montaje de las fotografías de las paredes, no así las de los expositores, donde algunas se pisan y otras tienen las esquinas adhesivas despegadas. Por cierto, se justifica la presentación en expositores diciendo que es “para remarcar su carácter objetual”.

Fundación Pedro Barrié de la Maza (Vigo) Catalá-Roca. Obras Maestras

Acumulación de fotografías montadas sobre marco ancho marrón con paspartú generoso y remontadas sobre unas estructuras metálicas que sobresalen un palmo de la pared. Dos hileras cortadas ocasionalmente por piezas de mayor tamaño. Escasísima separación. Multitud de reflejos. Más obras en el hall de entrada y en las antesalas. Un agobio. Vamos a los aseos a ver si allí también hay. No. Respiramos.

Marco: Cándida Höfer “Projects:Done”

Si pretendemos definir con un único adjetivo esta exposición, el primero que se nos ocurre es: aburrida. No sólo por las piezas que la componen sino por la presentación. Debe ser complicado instalar una exposición de fotografía (que no es arte) en un gran espacio, pero siempre se recurre a lo mismo para rellenar e intentar hacerla más atrayente: proyectores de diapositivas, expositores horizontales… En una de las salas hay dos proyectores colocados en unos soportes de 2 metros de alto en medio de la sala. Estéticamente discutible. En otra sala, un expositor muestra fotografías en blanco y negro colocadas unas encima de otras. Sin duda, muy discutible. Las composiciones realizadas con varias fotografías en las paredes ¿pretenden seguir una imaginaria retícula sin conseguirlo?. Por último, la iluminación no consigue eliminar los reflejos de los cristales que protegen las piezas.

Galería Adhoc: Carme Nogueira “Guided Tours, Viaxes Guiadas”

En la planta calle se muestra el proyecto “Rotterdamweg”. La sala aparece dividida por unas telas (fruto de la colaboración de La Canalla) con el fin de crear una sala de proyección. Esta separación corta la unidad de la exposición, descoloca al espectador y no consigue su cometido de oscurecer el espacio. También nos parece discutible la presentación de posters clavados con dos puntas sobre una de las paredes de dicha sala de proyección improvisada. Si se oscurece demasiado el espacio, no se ven ni se leen bien los posters y, si hay demasiada claridad no se ve bien la proyección. En el centro de la sala hay unos palés, que se suponen que son asientos, pero que uno no se atreve a utilizar por si acaso.

En el Callejón de Núñez (es decir, el sótano de la galería) se muestra “Porteños”, proyecto realizado en Valparaíso. La instalación consta de una habitación construida con cartones blancos absolutamente cutre, con un añadido pegado a la pared donde se inserta una pantalla mal encajada. Para disimular, se ha dejado la sala prácticamente a oscuras, con lo que apenas se puede leer la referencia de la pieza. Como diría el gran Paco de Lucía “si no tienes soniquete, pa que te metes, pa que te metes”.

Las “fashions” como siempre. Aún sin asumir que una galería es una tienda, que ellas son dependientas y que el visitante del día era un posible comprador. Es una pena que siempre que se visita Adhoc tenga uno la sensación de estar molestando y desee marcharse cuanto antes.

Lección Magistral de Anatomía en adhoc

Esta lección corre a cargo de Ángeles Agrela, y está impartida en la primera planta de la galería. Es una exposición que se ve en un golpe de vista, casi tienen más presencia la mesa de la gerente de la galería y el almacén. Los espectadores algo tímidos probablemente pensarán que ya no hay más que ver, pero si se dirigen hacia el almacén verán unas escaleras que les conducen a la obra de Fernando José Pereira, no recomendamos bajar a alérgicos al polvo ni a grupos; Es raro ver en un espacio tan grande un único asiento, teniendo en cuenta el gusto que tienen los museos y galerías por proporcionar un cómodo descanso al espectador, quizás porque piensen que es la única manera de que los asistentes dediquen parte de su tiempo a ver la proyección que se les oferta, puede que en adhoc asuman que en pocas ocasiones necesitarán más que un asiento, por desgracia así están las cosas.